Equilibrio cardiometabólico

¿Colesterol bueno o malo?

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2 min de lectura
14 de noviembre de 2024

Colesterol LDL y HDL

Producido en un 75% por el hígado y aportado en un 25% por la alimentación, el colesterol es un lípido indispensable para el organismo. Forma parte integrante de las membranas celulares y participa en la producción de algunas hormonas, en la producción de bilis y en la síntesis de la vitamina D.

El colesterol desempeña un papel crucial en el funcionamiento de nuestro organismo, tanto en hombres como en mujeres. En general, es un componente esencial de las membranas celulares y participa en la producción de hormonas esteroideas, como las hormonas sexuales. Las moléculas de colesterol también intervienen en la formación de las sales biliares, necesarias para la digestión de las grasas. Sin embargo, una acumulación excesiva de colesterol en los vasos sanguíneos puede provocar la formación de placas de aterosclerosis, reduciendo el flujo sanguíneo a los órganos vitales y aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

El exceso de colesterol en la sangre afecta a entre el 20 y el 30%* de la población francesa y puede originar desequilibrios cardiovasculares.

Los triglicéridos, las estatinas, el colesterol LDL y las lipoproteínas de alta densidad (HDL) son conceptos clave que debe conocer cualquier persona que desee mantener un equilibrio lipídico óptimo.

¿Colesterol bueno o malo?

Existen 2 tipos de colesterol, comúnmente llamados como colesterol bueno y colesterol malo.
El colesterol, considerado a menudo un enemigo para nuestra salud, desempeña en realidad un papel esencial en el buen funcionamiento de nuestro organismo. Se divide en dos categorías principales: el colesterol LDL, a menudo denominado colesterol «malo», y el colesterol HDL, conocido como colesterol «bueno». El colesterol LDL puede acumularse en las paredes de las arterias, formando placas que pueden provocar enfermedades cardiovasculares. En cambio, el colesterol HDL ayuda a transportar el exceso de colesterol al hígado para su eliminación. Los triglicéridos, otra forma de grasa presente en la sangre, también son un indicador importante de la salud cardiovascular.

  • El colesterol bueno, o colesterol HDL, está relacionado con las lipoproteínas de alta densidad (HDL). Estas captan el exceso de colesterol en las arterias y lo transportan al hígado, donde se metaboliza y se elimina.
  • El colesterol malo, o colesterol LDL, está relacionado con las lipoproteínas de baja densidad. Estas transportan el colesterol del hígado a los tejidos. En exceso, el colesterol malo puede infiltrarse y acumularse en las paredes de las arterias, provocando depósitos grasos que, poco a poco, pueden dificultar la circulación sanguínea.

¿Qué significa «tener» colesterol?

El colesterol se mide en gramos por litro de sangre (g/L), y a veces también en milimoles por litro (mmol/L). El nivel ideal no debe superar los 2 g/L para los adultos. En general, los médicos prefieren pedir una medición específica del colesterol LDL y HDL.

En la actualidad, se considera que el nivel de colesterol LDL recomendado debe ser inferior a 1,6 g/L y depende del valor de otros parámetros biológicos (IMC**, tensión arterial, etc.). La determinación del colesterol HDL se utiliza para calcular la siguiente relación: (colesterol total/colesterol HDL) inferior o igual a 4,5. Por encima de este nivel, se considera que el riesgo arterial es mayor.

Conocer su colesterol

¿Cuándo hacerse un análisis de sangre? Puede hacerse en la edad adulta o antes si hay antecedentes familiares de colesterol alto. Sólo un médico puede diagnosticar un exceso de colesterol en sangre.

¿A qué edad se debe empezar a controlar el nivel de colesterol?

¡Los buenos hábitos alimentarios deben iniciarse lo antes posible! Desde la infancia, hay que vigilar los hábitos alimentarios y limitar el consumo de alimentos excesivamente grasos, sobre todo si hay antecedentes familiares.

¿Cuáles son las causas del colesterol alto?

La regulación del colesterol depende principalmente de 2 factores:

  • Factor genético: el organismo puede producir un exceso de colesterol por razones genéticas. En este caso, una dieta adecuada puede ayudar a limitar el exceso de colesterol.
  • Factor nutricional: la dieta desempeña un papel importante en los niveles de colesterol. Se recomienda que el consumo de colesterol en la alimentación no supere los 300 mg al día. El colesterol se encuentra sobre todo en los alimentos de origen animal y en los alimentos ricos en grasas saturadas (embutidos, huevos, despojos, foie gras…).

Existen otros factores que pueden originar un nivel alto de colesterol o agravar un exceso ya existente. Entre ellos se encuentran el sobrepeso, los niveles altos de azúcar en sangre, el tabaquismo, el estrés y la falta de actividad física. Por tanto, las causas de la hipercolesterolemia son múltiples, entre ellas los factores genéticos, una dieta rica en grasas saturadas y azúcares, y un estilo de vida sedentario. La hipercolesterolemia puede afectar tanto a hombres como a mujeres, aunque los riesgos pueden variar dependiendo de la edad y de los antecedentes médicos.

Además, la hipertensión arterial también ejerce una presión adicional sobre las paredes de los vasos sanguíneos, lo que facilita la acumulación de placas de colesterol. El tabaquismo también es perjudicial, ya que daña las paredes vasculares y reduce los niveles de colesterol bueno (HDL). Además, el consumo excesivo de alcohol también puede alterar el metabolismo de los lípidos, aumentando los niveles de colesterol malo (LDL). Por último, la diabetes contribuye a la formación de depósitos grasos en las arterias, por lo que el control del colesterol es aún más importante para las personas que padecen esta enfermedad.

Para contrarrestar los efectos nocivos del colesterol malo, existen algunos hábitos alimentarios que pueden ser beneficiosos. Los esteroles vegetales, que se encuentran en alimentos como las nueces, son conocidos por su capacidad para reducir la absorción de colesterol en el intestino. Por tanto, consumir nueces de diferentes formas, ya sea como tentempié o incorporados a los platos, puede contribuir a un mejor control del colesterol. Seguir una dieta rica en esteroles vegetales y otras fuentes de lípidos buenos, limitando al mismo tiempo las grasas saturadas y trans, es una estrategia eficaz para mantener niveles saludables de colesterol y proteger la salud cardiovascular.

Su médico sigue siendo su mejor consejero. Descubra los suplementos alimenticios contra el colesterol que pueden ayudarle.

FUENTES

  • *Programme National de Réduction des Risques Cardiovasculaires 2002-2005. Rudchini A et al. Prevalence of cardiovascular risk factors in a French population. J. Hypertens. Suppl. 1998 ; 16(1):S85-S90. 
  • **IMC : Indice de Masse Corporelle
Laboratorio Lescuyer
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